Dios siempre llega a tiempo

Es frecuente que pensemos que Dios se tarda en responder nuestra oración, incluso hemos podido llegar a pensar que se encuentra muy ocupado con otros asuntos mas importantes, o que no le interesa nuestra petición. Pero nuestro Señor, solo tiene 3 respuestas a tus peticiones:

 

1. SI
2. NO
3. TENGO UNA MEJOR IDEA

 

Cuando nuestro Señor nos responde, SIEMPRE lo hace a SU TIEMPO. Esto significa que Dios decide cual es el mejor y mas exacto momento para respondernos; y si El, es el ser mas sabio de todo lo existente, material y espiritual; ¿quien mejor para decidir esto para nosotros?

 

En la Biblia leemos una historia de nuestro Señor Jesucristo, cuando es informado que su amigo Lázaro se encontraba gravemente enfermo:

 

“Un hombre llamado Lázaro estaba enfermo. Vivía en Betania con sus hermanas María y Marta. María era la misma mujer que tiempo después derramó el perfume costoso sobre los pies del Señor y los secó con su cabello. Su hermano, Lázaro, estaba enfermo.  Así que las dos hermanas le enviaron un mensaje a Jesús que decía: «Señor, tu querido amigo está muy enfermo».” (Juan 11:1-3 NTV)

 

Jesús al escuchar esta noticia, solo dice que todo esto esta sucediendo con el propósito de que Dios sea glorificado, y por supuesto, no lo comprendieron los demás:  

 

“Cuando Jesús oyó la noticia, dijo: «La enfermedad de Lázaro no acabará en muerte. Al contrario, sucedió para la gloria de Dios, a fin de que el Hijo de Dios reciba gloria como resultado».” (Juan 11:4)

 

 ‘Aparentemente’, Jesús no se apresuro lo necesario para llegar a visitar a su amigo, pues aunque la noticia era alarmante y muy urgente, Jesús decidió llegar a casa de Lázaro, María y Martha, en el preciso momento que el así lo decidió, varios días mas tarde: 

 

“Aunque Jesús amaba a Marta, a María y a Lázaro,  se quedó donde estaba dos días más.” (Juan 11:5-6)

 

Jesús finalmente lea avisa a sus discípulos que irán a ver a su amigo Lázaro, indicándoles que ya ha muerto. También les deja saber que TODO tiene un propósito para los que aman a Dios; y este propósito es de bienestar y que glorifique a Dios,

 

 Por eso les dijo claramente:

—Lázaro está muerto. Y, por el bien de ustedes, me alegro de no haber estado allí, porque ahora ustedes van a creer de verdad. Vamos a verlo (Vrs. 14-15)

 

Al llegar Jesús a Betania, que era donde vivía Lázaro, le informaron que Lázaro había muerto hacia 4 días.

^”Cuando Jesús llegó a Betania, le dijeron que Lázaro ya llevaba cuatro días en la tumba.” (Vrs. 17)

 

Al aproximarse Jesús a la casa de Lázaro, Marta, la hermano de Lázaro, corre al encuentro de Jesús para avisarle (reprocharle) que Lázaro ya había muerto; que si Jesús se hubiera apurado a llegar antes, Lázaro todavía vivirla. Y María al encontrarse con Jesús, le dice lo mismo

 

Cuando Marta se enteró de que Jesús estaba por llegar, salió a su encuentro, pero María se quedó en la casa.  Marta le dijo a Jesús:

—Señor, si tan sólo hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto; (Vrs. 20-21)

 

 Cuando María llegó y vio a Jesús, cayó a sus pies y dijo: —Señor, si tan sólo hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto.(Vrs. 32)

 

El inmenso amor que Jesús sentía para la familia de Lázaro, queda de manifiesto al derramar lagrimas por el sufrimiento de Marta y María. Jesús no lloro por Lázaro, porque sabía que resucitaría, Jesús lloro por Marta y María, porque el dolor de perder a su hermano no les permitía refugiarse en la esperanza que Jesús les había hablado, estaban sin paz ni consuelo.  

 

— ¿Dónde lo pusieron? —les preguntó. Ellos le dijeron: —Señor, ven a verlo.  Entonces Jesús lloró.  Las personas que estaban cerca dijeron: «¡Miren cuánto lo amaba!».(Vrs. 34-36)

 

Jesucristo conocía perfectamente la condición de Lázaro, sabia con exactitud cuando moriría; Y en base a esto, Jesús, el Hijo de Dios, decidió exactamente en que instante se presentaría ante Lázaro (ante su cuerpo inerte) y ante sus hermanas, Jesús por amor a ellos, definió lo que sucedería en los siguientes días, acontecimientos que seria de plena y amplia bendición para Lázaro, Marta y María; y le darían gloria a Dios. Este evento fue tan único y trascendental en la vida de la familia de Lázaro, que lo recordamos hasta el día de hoy. 

 

Jesús respondió:

— ¿No te dije que si crees, verás la gloria de Dios?

 Así que corrieron la piedra a un lado. Entonces Jesús miró al cielo y dijo: «Padre, gracias por haberme oído. Tú siempre me oyes, pero lo dije en voz alta por el bien de toda esta gente que está aquí, para que crean que tú me enviaste».  Entonces Jesús gritó: «¡Lázaro, sal de ahí!». Y el muerto salió de la tumba con las manos y los pies envueltos con vendas de entierro y la cabeza enrollada en un lienzo. Jesús les dijo: «¡Quítenle las vendas y déjenlo ir!». (Vrs. 41-44)

 

Estoy totalmente seguro que Lázaro experimento algo que no pudo explicar con palabras, durante esos 4 días que estuvo muerto, y fue tan espectacular, que marco el resto de su vida.

 

Jesucristo llego a Lázaro en el momento exacto de Dios, ni un minuto antes, ni un minuto después; y esto por supuesto, solo fue entendido y conocido por Marta y María hasta después de la resurrección de su hermano.

 

Hoy, tu y yo, tal vez estemos ansiosos y hasta desesperados por recibir la visita del Maestro a nuestra vida, porque el problema, la necesidad y aflicción esta a punto de aniquilarnos. Ya le mandamos decir en oración que estamos a punto de morir, nos preguntamos por que se esta tardando tanto, nos desesperamos mirando el camino desde nuestra ventana… y nada que aparece el Maestro.

 

Pero recuerda, tu eres de las amistades cercanas e intimas de Jesús, tan cercano, que El murió por ti en especial en la cruz del Calvario; El conoce la magnitud de tu aflicción y las consecuencias de tu problema… ¡PERO EL SEÑOR YA DEFINIO EL PRECISO  INSTANTE DE TU VISITACION! El ya sabe el día y la hora exacta en que se presentara un ángel con la respuesta a tu oración. Si tú está enfrentando una crisis de vida o muerte, recuerde: Dios nunca se adelanta ni se atrasa.

 

Cuando tu calendario y tu reloj no es el mismo que el de Dios, alguien está o adelantado o atrasado. Y, ¿adivine quién nunca se ha adelantado ni se ha atrasado?

Padre, gracias porque tu horario es perfecto, y siempre llegas justo a tiempo.