SI NO CONFÍAS EN EL SEÑOR TU SALVADOR, VIVIRÁS ESTRESADO

Domingo 9 de junio del 2024

“Unos confían en carros y otros en caballos, pero nosotros confiamos en el nombre del SEÑOR nuestro Dios”. Salmo 20:7 


Todo el mundo confía en algo. La pregunta es: ¿En qué o en quién estás confiando tú?

Nuestra actual sociedad, tan moderna e inclusiva tiende a menospreciar la confianza, o al menos eso dicen. Somos escépticos con todos y con todo. No confiamos en el gobierno ni en los periodistas ni en los medios de comunicación. Los empleados no confían en sus jefes. Los clientes no confían en las empresas que les venden algo. ¡Ni siquiera confiamos en el informe meteorológico! Al analizar esto llegamos al fondo de la decadencia de la confianza actual, y descubrimos que la “decadencia de la verdad” en nuestra sociedad, es el verdadero problema.

La verdad y la confianza van de la mano, no puede existir una sin la otra. Confías en las personas que te dicen la verdad. Y no confías en las personas si crees que no te dicen la verdad. Y si no crees en la verdad absoluta (Dios), entonces no puedes confiar en que alguien te diga la verdad.

Nuestra falta de confianza nos causa un estrés tremendo en la vida. Nacimos para confiar. Dios nos dotó de la capacidad y el deseo de confiar en algo más grande que nosotros mismos, porque quería que tuviéramos una relación con Él.

Si no confías en Dios, entonces crearás algo más en qué o en quién confiar. Puede ser un título o reconocimiento colgado en la pared, dinero en el banco, tu cónyuge, tu carrera o un pasatiempo. Este deseo de confiar en algo más grande que nosotros mismos no es nada nuevo. Los escritores bíblicos también eran muy conscientes de ello en sus culturas y sociedades. La Biblia dice en el Salmo 20:7: “Unos confían en carros y otros en caballos, pero nosotros confiamos en el nombre del SEÑOR nuestro Dios”.

La Biblia tiene una palabra para cualquier cosa en la que confiamos en lugar de confiar  en Dios. La Biblia lo llama un «ídolo». La Palabra de Dios dice que, por nuestro propio bien, debemos mantenernos alejados de los ídolos: “Por vuestro propio bien . . . No pequéis haciéndoos ídolos de ninguna forma” (Deuteronomio 4:15-16).

Entonces, ¿cómo puedes conocer la verdad? Solo pasando tiempo leyendo, estudiando y meditando en las Escrituras. Aprenderás lo que es la verdad, al conocer a una persona, JESUCRISTO. Al hacerlo, encontrarás el lugar más seguro para poner tu confianza, y una base firme para vivir la vida.

MEDITA EN ESTO:

  • ¿En qué estás tentado a confiar en lugar de en Dios?
  • ¿Cómo la falta de confianza en Dios genera estrés en tu vida?
  • Mire las áreas de estrés en su vida. ¿Qué revelan sobre tu confianza en Dios? ¿Cómo puedes cambiar eso?

¿Ya has puesto tu confianza en la promesa de salvación eterna de Dios a través de Jesucristo?


Si estás listo para entregar tu vida a Jesús, entonces haz esta oración:

“SEÑOR Jesús, me has prometido que si creo en ti, todo lo que he hecho mal será perdonado y algún día me aceptarás en tu hogar eterno en el Cielo.


“Confieso mi pecado y te recibo en mi vida como mi Señor y Salvador. Confío en ti cuando dices que la salvación viene por gracia, a través de la fe, y no por algo que yo pudiera hacer. Hoy te entrego cada parte de mi vida para tu dirección.


“Estoy agradecido por tu amor incondicional. Quiero usar el resto de mi vida para amarte y servirte en lugar de servirme a mí mismo. Te entrego mi vida y te pido que me salves y me aceptes en tu familia. En el nombre de Jesús… Amén.»

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