PLANEACIÓN FINANCIERA PERSONAL

Viernes 7 de junio del 2024

«Los sabios viven en la riqueza y el lujo, pero los tontos gastan su dinero tan rápido como lo obtienen». Proverbios 21:20 


He platicado con parejas que luchaban por mantener a flote su matrimonio, e incluso estaban pasando por una separación temporal. Y puedo decirles que la razón número uno por la que las parejas se divorcian no es el adulterio ni el abuso.

¡Son las deudas familiares! En una encuesta del 2023, más de la mitad de los encuestados creía que tener una pareja endeudada hasta el cuello es una razón válida para considerar el divorcio.

No debería sorprendernos que la deuda cause tantos problemas en las relaciones. La Biblia deja claro que es simplemente una tontería no administrar sabiamente el dinero, y las tonterías nunca terminan bien.

Proverbios 21:20 dice: “Los sabios viven en riquezas y lujos, pero los tontos gastan su dinero tan rápido como lo obtienen” (NTV).


Muy a menudo nuestra sociedad, cultura y marketing nos convencen de comprar ahora y pagar después. El ciudadano occidental promedio, tan letrado, demócrata, culto y preparado, carga aproximadamente el 130% de su ingreso neto que recibe, a su tarjeta de crédito. Esto lo lleva directamente a la deuda, ¡Y Dios llama a eso una tontería!

Amigo, nadie de la noche a la mañana y sin darse cuenta se endeuda, ni tampoco sale de ella. Si deseas construir tu futuro financiero sobre la base del compromiso de ser responsable, debes comenzar con una actitud de intencionalidad, que es no solo desearlo, sino, a como dé lugar realizarlo. Una vez que haya asumido ese importante compromiso, necesitará un plan para lograrlo.Los grandes magnates del mundo occidental, como los Rockefeller, pusieron en práctica el principio 10-10-80 desde que eran niños. Y es una excelente manera de poner por obra tus decisiones financieras.

*Destina el 10% a labores espirituales y filantrópicas. Dios bendice las áreas de tu vida donde primeramente sigues los lineamientos de Él.


*Guarda el 10% para el futuro. Comprométete a ahorrar dinero cada vez que ganes dinero.

*Vive con el 80%. Sólo los tontos gastan todo lo que reciben.

Te guste o no, Dios usa el dinero para ponerte a prueba y conocer cómo reaccionas. Él está poniendo a prueba tu responsabilidad. Dios observa tus decisiones financieras, y cuando llegues al Cielo te preguntará: «¿Fuiste responsable de lo que te di en la Tierra?» No te puedes imaginar la cantidad tan abrumadora de lealtades, amores, amistades, promesas, acuerdos, sueños, responsabilidades y proyectos que se desbaratan y deshacen, por «la maldición verde», por el amor al dinero.

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La respuesta a esta pregunta de Dios, dependerá de las decisiones que tomes hoy. Haz un plan para administrar tus recursos sabiamente y pon dinero en lo que a Dios le agrada, ahorra para el futuro y vive alegremente y en paz dentro de tus posibilidades (el 80% restante).

REFLEXIONA EN ESTO:

  • ¿Cuál es tu mayor tentación cuando se trata de administrar tus ingresos líquidos de manera responsable?
  • ¿Te resulta más difícil dar el 10 % de tus ingresos para los planes de Dios para este mundo, que ahorrarlo? 
  • ¿Cómo puedes ayudar a tus hijos o a tu familia a comprender la visión de Dios sobre la responsabilidad financiera?

“ESA «CANIJA» PAJA EN EL OJO AJENO”

Viernes 7 de junio del 2024

¿Quién no ha escuchado esta declaración?:
“No juzguéis, para que no seáis juzgados”. Mateo 7:1

Y es que somos muy astutos para salir bien librados, porque para cubrir nuestros errores y faltas delante del Señor, y de cualquier autoridad, siempre desviamos la atención mostrando los errores de los demás… «sí robé, pero aquel robo más»


“Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados, y con la medida con que medís, os será medido”. Mateo 7:2

El Señor no quiere que «nos safemos» de nuestra responsabilidad:

“¿Y por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano, y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo?”. Mateo 7:3

El Señor quiere que seamos responsables, es decir que “respondamos” sincera y abiertamente delante de Él cuando nos equivocamos, y no tratar de desviar la atención hacia el error del líder, del político o de los padres, porque si hacemos esto, estaremos negando nuestra verdadera situación, la cual independientemente de qué posición tenga en el «ranking» de «pecadología», es NUESTRA falta, y por ella, si no la reconocemos, arrepentimos y pedimos perdón al Señor, nuestro destino eterno será el lago de fuego y azufre.

“¿O cómo dirás a tu hermano: Déjame sacar la paja de tu ojo, y he aquí la viga en el ojo tuyo?”. Mateo 7:4

Además por lógica, ¿cómo un impedido, un prácticamente ciego con una “viga en su ojo”, podrá guiar a un “tuerto”, que ve parcialmente?

Hoy el Señor nos invita a ser maduros y aceptar nuestros errores, nadie es perfecto, pero lo peor de equivocarse, es no reconocerlo o tratar de minimizarlo comparándonos con otros. Por supuesto que lo malo que hagas, comparado con Hitler, Atila, el político en turno o los miembros del «cartel de la droga» de moda, pareciera insignificante, pero para Dios no existe el «ranking» de pecados, desde una mentira a tu conyuge hasta el asesinato de millones en campos de concentración, todos son lo mismo, para Dios es pecado. Y por eso precisamente, Jesús tuvo que venir a morir por nosotros en esa infamante cruz:

“¡Hipócrita! Saca primero la viga de tu propio ojo, y entonces verás bien para sacar la paja del ojo de tu hermano”. Mateo 7:5

Recuerda que cuando señalamos a otro con el dedo índice, los otros tres dedos de la mano apuntan hacia uno mismo. Seamos sinceros y aprovechemos la misericordia y la gracia del Señor.

“Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad”. 1 Juan 1:9-10

Por todo esto, hoy a 5 días de los sufragios emitidos en nuestro país, no olvides que en el diseño del Señor para relacionarse con su creación, está el «libre albedrío», que consiste en dejar a Su creación que tome sus decisiones, libremente, usando la capacidad intelectual con que la dotó, y como contraparte, vivamos con las consecuencias, buenas y malas, de nuestras elecciones. De ahí viene todo el diseño para voluntariamente aceptar a Jesucristo como Señor y Salvador, de cada uno en particular depende esta decisión.

«Mira que estoy a la puerta y llamo. Si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré, cenaré con él y él conmigo.« Apocalipsis 3:20

El Señor Jesucristo, en lo más importante y trascendental de la vida del hombre, que es nuestra relación personal con Él y vida eterna, no nos impone su presencia, ni entra a la fuerza a nuestro corazón, Él siempre está a nuestro alcance, pero nosotros tenemos que decidir, elegir abrir la puerta de nuestro corazón. Él siempre respetará nuestro «libre albedrío», de otra manera, seríamos como los que piensan como Calvino, que simplemente somos marionetas del Creador, sin voluntad ni capacidad de decidir, y que todo, todo, todo, hasta nuestro destino eterno, ya está definido por Él, sin importar nuestras decisiones en esta vida.

«Mira, hoy te doy a elegir vida y prosperidad o muerte y destrucción» Deuteronomio 30:15

Así mismo el domingo pasado, todos los que voluntariamente quisieron votar, porque es un privilegio y no una obligación, lo hicieron libremente de acuerdo a su propia y exclusiva preferencia. La intervención del Señor fue solamente la de respetar la elección, la decisión de su creación en México, y si el resultado fue abrumador, contrario a tus preferencias personales, no quieras «echarle la culpa a Dios», porque Él no impuso a nadie, la mayoría del pueblo mexicano lo hizo, con trucos o sin ellos, y el Señor solo acepta esa decisión, en el ejercicio de su «libre albedrío».

Ahora, sí nuestro Dios y Señor sabe que fue una mala decisión de la mayoría y que sufriremos las consecuencias (porque Él todo lo sabe, presente, pasado y futuro, pero el saberlo no significa que lo imponga cual titiritero cósmico), El Señor tan lleno de amor, nos lanza una «tabla de salvación» a todos sus hijos, (no a toda su creación), para ser librados de esas terribles consecuencias…

«si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.» 2 Crónicas 7:14

El Señor indica muy claramente que escuchará nuestra oración de súplica, y nos librará; PERO solo si somos Su pueblo, si somos de la Familia de Dios. No dice si eres de esta o aquella religión, o si eres la «madre Teresa» de México, dice si eres Su pueblo, y esto solo puede ser al aceptar que has cometido faltas que merecen la muerte eterna (porque nadie es perfecto), y también reconoces que Jesús es el Hijo de Dios que vino a pagar la sentencia de muerte que pendía sobre tu cabeza, como justo pago por tu vida alejada de la perfección; y a esto se le llama «abrir la puerta de tu corazón».

Hoy, con la incertidumbre de la vida en este país a partir de noviembre próximo, todavía puedes estar a salvo en puerto seguro para enfrentar ese huracán categoría 5 que se avecina, y ese lugar de refugio es la Familia de Dios, por la muerte y resurrección de nuestro Señor Jesucristo, no una religión, o una secta o un grupo espiritual, solo siendo parte de esta familia universal de Dios, aceptando que Jesús murió por ti. 

Buenos días