¿Y ESE ES TU SUEÑO, O ES EL DE DIOS?

Lunes 29 de abril del 2024

“Si intentas aferrarte a tu vida, la perderás. Pero si entregas tu vida por mí y por las Buenas Nuevas, la salvarás”. Marcos 8:35 


¿Cómo saber si estás viviendo para tu sueño, o para el sueño de Dios?

Quizás pienses que fuiste creado para despertarte por la mañana, ir a trabajar, volver a casa, mirar televisión e irte a la cama, ganar un poco de dinero, jubilarte y morir. ¿En serio…? ¿Crees que eso es todo para lo que Dios te puso aquí en la Tierra, en este tiempo y lugar?

Si tu sueño verdaderamente proviene del corazón de Dios, de alguna manera estará conectado con el Cuerpo de Cristo, y con su plan para el mundo. ¿Por qué Dios te daría un sueño egocéntrico, desconectado de lo que quiere hacer en el mundo? Él quiere usarte para Su sueño. Quiere utilizarte para Su plan.


Dios está construyendo una familia, y está reuniendo a miembros de cada nación, tribu y grupo étnico. Cuando todos los que Él sabe que serán parte de Su familia estén en ella, esta familia estará completa. Entonces estaremos entrando en la fase dos del plan, que es la eternidad. Y ese es el gran plan global de Dios.

Justo antes de que Jesús regresara al Cielo después de su resurrección, les entregó a los discípulos un gran sueño. Se le llama «La Gran Comisión»“Id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Enseñad a estos nuevos discípulos a obedecer todos los mandamientos que os he dado. Y estad seguros de esto: Yo estaré con vosotros siempre, hasta el fin de los tiempos” (Mateo 28:19-20).

La Gran Comisión es TÚ comisión. Hemos tenido 2 mil años en los que Dios ha ido construyendo su familia, de modo que ahora hay 2,500 millones de personas en ella. La iglesia es casi tan grande como China y la India juntas. Es más grande que cualquier otra cosa en este planeta, porque Dios la creó. Y ese es todo el propósito de la historia.

Y cuando Dios te da un sueño para tu vida, de alguna manera este sueño estará conectado con Su plan global. Está conectado con el crecimiento de Su Reino y su familia hasta el día en que se complete, y todos nos vayamos al Cielo.


Marcos 8:35 dice: “Si intentas conservar tu vida, la perderás. Pero si entregas tu vida por mí y por las Buenas Nuevas, la salvarás”.

No fuiste puesto aquí en la Tierra para solo vivir para ti mismo, como arbusto del campo. Pídele a Dios que te dé Su sueño para tu vida, para que puedas ser parte de la historia más grande, trascendental, importante y eterna en la historia de la humanidad.

MEDITA EN ESTO:

  • ¿Cuáles son tus sueños para tu vida? ¿Cómo podrían tus sueños contribuir al crecimiento del Reino de Dios en la Tierra?
  • ¿Por qué es importante tener metas?
  • Cuando buscas formas en las que Dios está llevando a cabo su plan en el mundo, ¿qué ves?

¿Ya has confiado en la promesa de salvación de Dios a través de Jesucristo?


Si estás listo para entregar tu vida a Jesucristo, entonces haz esta oración:

“Señor Jesús, me has prometido que si creo en ti, todo lo que he hecho mal será perdonado y algún día me aceptarás en tu hogar eterno en el Cielo.


“Confieso mi pecado y te recibo en mi vida como mi Señor y Salvador. Confío en ti cuando dices que la salvación viene por gracia, a través de la fe, y no por algo que yo haga o pague. Hoy te entrego cada parte de mi vida a tu control y  dirección.


“Estoy agradecido por tu amor incondicional. Quiero utilizar el resto de mi vida para amarte y servirte en lugar de servirme a mí mismo. Te entrego mi vida y te pido que me salves y me aceptes en tu familia. En el nombre de Jesús te lo pido…

Amén.»

“JESUCRISTO, EL MÁS GRANDE Y EL ÚNICO”

Lunes 29 de abril del 2024.


A pesar de que muchas de las profecías bíblicas se han cumplido, y otras se van cumpliendo, algunas personas todavía dudan de la divinidad de Jesucristo.

“Si yo doy testimonio acerca de mí mismo, mi testimonio no es verdadero” Juan 5:31

Jesús dejaba muy claro que Él es Dios, y es hombre; y que su amor es tan grande como el del Padre Celestial.


“Otro es el que da testimonio acerca de mí, y sé que el testimonio que da de mí es verdadero” Juan 5:32

Y para evitar confusión, el mismo Señor Jesús dejaba que las Escrituras mismas hablaran de Él. Su humanidad vio necesario hablar de Juan el bautista, su entrañable primo.


“Vosotros enviasteis mensajeros a Juan, y él dio testimonio de la verdad” Juan 5:33

La maldad de los fariseos no tenía límite, y habían sido permisivos para que Herodes ejecutara a Juan el bautista, tratando de poner obstáculos a Jesús acerca de su personalidad.


“Pero yo no recibo testimonio de hombre alguno; mas digo esto, para que vosotros seáis salvos” Juan 5:34

El Señor Jesús, todo lo sabe y ve los corazones necesitados, pero también ve el corazón incrédulo.


“El era antorcha que ardía y alumbraba; y vosotros quisisteis regocijaros por un tiempo en su luz” Juan 5:35

Por ello, el Señor recrimina amorosa y muy inteligentemente lo que habían hecho con Juan, quien anunciaba la salvación eterna, cuando bautizó a Jesús.


“Mas yo tengo mayor testimonio que el de Juan; porque las obras que el Padre me dio para que cumpliese, las mismas obras que yo hago, dan testimonio de mí, que el Padre me ha enviado” Juan 5:36

Desde luego, nadie como el Señor Jesucristo. Solo Él es el Redentor único y perfecto, aunque a la fecha ya no haya fariseos, sigue habiendo gente que «tuerce» sus creencias, debido a que dentro de los personajes que vivieron con Jesús, había gente virtuosa, como Juan, su madre María, Lázaro y su familia, y un largo etcétera de personas que tradicionalmente se les atribuye «cierta perfección» por su cercanía con el Maestro, aunque sabemos perfectamente que el único perfecto es nuestro Señor Jesucristo, y que todos, por su muerte y resurrección, si así lo creemos y aceptamos, seremos revestidos de Cristo (Gálatas 3:27), por lo que el Padre al mirarnos, no verá nuestra humanidad imperfecta y podrida; verá la perfección de Jesucristo en nosotros.

“También el Padre que me envió ha dado testimonio de mí. Nunca habéis oído su voz, ni habéis visto su aspecto”. Juan 5:37

Por muy admirable que sea la persona, no hay ninguno como el Señor Jesucristo. Solo Él nos ama tanto que dio su vida para perdonarnos y darnos vida eterna.

“ni tenéis su palabra morando en vosotros; porque a quien él envió, vosotros no creéis”. Juan 5:38

Solo Jesús, puede quitar el velo de tus ojos por el amor que nos tiene y lo hace a través de Su Palabra y para no equivocarnos en las profecías cumplidas y por cumplir, debemos leer, estudiar, pero, sobre todo “atesorar” en nuestro corazón la Palabra del Señor.

Hay varios personajes bíblicos como Elías y Enoc que no murieron, pero fueron arrebatados al Cielo. Incluso la tradición dice que María, la madre de Jesús, ascendió al Cielo como el Señor Jesús lo hizo después de resucitar, pero ninguno de ellos fue enviado por Dios para sacrificarse en lugar nuestro. Ninguno tomó nuestro lugar y sufrió la cruz, fue avergonzado padeciendo el castigo que nosotros justamente merecíamos. Solo Jesús pudo cumplir completamente la profecía, y por su llaga fuimos sanados. Cómo cordero fue llevado al matadero. Y por esto, Jesucristo es el ÚNICO. Único y suficiente salvador para todo aquel que cree en Él, hoy por eso el Señor nos recomienda:

“Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí”. Juan 5:39

Por todo esto, el mismo Jesucristo es el “LOGOS”, la Palabra de Dios. El es el «VERBO» (Juan 1:1). La acción de Dios. Jesucristo es el único. Ven a Jesús, conoce todo lo que la Biblia dice de Él, y tendrás vida eterna.

Buenos días