LAS PERSONAS PERDONADAS, PERDONAN A LOS DEMÁS

Domingo 5 de noviembre del 2023

LAS PERSONAS PERDONADAS, PERDONAN A LOS DEMÁS

“de modo que se toleren unos a otros y se perdonen si alguno tiene queja contra otro. Así como el Señor los perdonó, perdonen también ustedes.” Colosenses 3:13


Mucha gente piensa que Dios guarda rencores. Se imaginan a Dios en el Cielo, esperando para mandarles un rayo por cualquier cosa que hagan mal.

Pero así es como realmente es Dios: “»Soy yo, solo yo, el que por amor a mí mismo borra tus transgresiones y no se acuerda más de tus pecados.” (Isaías 43:25).

Dios quiere perdonarte y ha hecho todo lo necesario para perdonar tus pecados mediante Cristo Jesús.Incluso antes de que creara el mundo, Dios ya estaba planeando en Cristo perdonar tus pecados. Él sabe todo lo malo que vas a hacer. ¡Nada de eso le sorprende! Antes de que nacieras, Dios hizo un plan para ofrecerte perdón por todo lo malo que hay en tu vida.

Por eso Dios puede decir esto: “Por lo tanto, ya no hay ninguna condenación para los que están en Cristo Jesús,” (Romanos 8:1).

La condenación ha desaparecido por lo que Jesucristo hizo en la cruz por nosotros. Él ofrece perdón incondicional, completo, consistente, eterno y por gracia para todos los que quieran aceptarlo.

¡Qué alivio! No tienes que sufrir ni pagar por tus pecados ahora, ni en la eternidad. Ya fueron pagados por Jesucristo. Eres perdonado si aceptas ese inmerecido regalo de salvación de Jesús.


Una vez que reconoces que has sido perdonado, ya estás capacitado y fortalecido para perdonar a otras personas.

¿Y cómo haces esto? Sean comprensivos con las faltas de los demás y perdonen a todo el que los ofenda. Recuerden que el Señor los perdonó a ustedes, así que ustedes deben perdonar a otros. (Colosenses 3:13).


Mírate bien a ti mismo, y podrás ver la fealdad, egoísmo y el pecado en tu carne. Pero lo importante es cómo te ve Dios. Eres su creación, eres su obra maestra diseñada para vivir para Él y ser de bendición para los demás.

Cuando miras a través de los ojos de Dios, puedes ver el perdón que sólo Él puede dar. Al aceptar su perdón en tu vida, podrás ofrecerlo a los demás.

REFLEXIONA EN ESTO:

  • ¿A quién necesitas perdonar hoy?
  • ¿Alguien en tu vida está sufriendo por cargar una pesada culpa? ¿Cómo puedes compartirle esperanza, diciéndoles que Jesús ya ha cubierto su pecado y le ofrece el regalo del perdón?
  • ¿Por qué nos cuesta tanto aceptar lo que no estamos dispuestos a dar?