¿QUÉ HACER EN MEDIO DE LA TEMPESTAD?

Jueves 18 de Febrero del 2021

¿QUÉ HACER EN MEDIO DE LA TEMPESTAD?


«Pero, al sentir el viento fuerte, [Pedro] tuvo miedo y comenzó a hundirse. Entonces gritó: —¡Señor, sálvame!»  Mateo 14:30 (NVI)


Cuando estés atravesando por una tormenta en tu vida, Dios no estará distante, ni se desentenderá de ti. Él estará contigo y estará trabajando activamente en tu vida para tu bien.


Si sientes que te estás hundiendo en la tormenta, aquí hay cinco cosas que Dios quiere que hagas:

   ANÍMATE, PORQUE JESÚS ESTÁ CONTIGO. 
Nunca discutas con tu temor. ¡Solo dile a adónde se vaya! Dile que vaya a hablar con Jesucristo.


   ARRIÉSGATE EN FE.   
No le pidas a Dios que bendiga lo que estás haciendo. En cambio, haz lo que Dios está bendiciendo. Pregúntele qué quiere que hagas y luego está dispuesto a hacerlo con Él.

   MANTÉNTE ENFOCADO EN JESÚS. En el momento en que quitas tus ojos del Señor, te hundirás. Mateo 14:30 dice: “Pero cuando [Pedro] vio el viento, tuvo miedo y, comenzando a hundirse, gritó: ¡Señor, sálvame!”. Si te concentras en el viento y las olas, tus circunstancias, te hundirás, como le sucedió a Pedro.

   NO DUDES. 
No necesitas una gran fe para superar esa tormenta en tu vida. Solo necesitas fe en la persona adecuada: en Jesucristo.

   ALABA A DIOS. 
En medio de esa terrible tormenta, incluso cuando sientas que te estás hundiendo, y aunque estés muerto de miedo, alábalo todo el tiempo. Da gracias a Dios en medio de la tormenta, no por la tempestad, sino porque ahí mismo, Él está contigo.


¿Qué tormenta te está golpeando en este momento? ¿Qué tempestad te está hundiendo? ¿Por qué crees que Dios está permitiendo que atravieses ese vendaval?

El Señor te está permitiendo atravesar esta tormenta por las mismas razones por las que envió a los discípulos a la tempestad. Quiere que experimentes, aprendas y escuches su voz diciéndote: «Soy todo lo que necesitas. Puedo manejar cualquier cosa. Y vendré a ti caminando sobre lo que más te asusta. No te estoy pidiendo que vengas a mí. Yo voy hacia ti.

Si estás sintiendo que empiezas a hundirte, no temas. Solo clama a Jesús. Encontrarás que Él ya está contigo.


REFLEXIONA EN ESTO:

  • ¿Qué tormenta necesitas hoy entregarle a Jesús?
  • ¿Cómo has crecido en tu comprensión de Dios, debido al paso de una tormenta por tu vida?
  • ¿Qué puedes hacer para limitar las distracciones que te impiden concentrarte en Dios?