PERDONA PORQUE TÚ LO HAS SIDO

Domingo 28 de Febrero del 2021

PERDONA PORQUE TÚ LO HAS SIDO

“Al contrario, sean bondadosos entre ustedes, sean compasivos y perdónense las faltas los unos a los otros, de la misma manera que Dios los perdonó a ustedes por medio de Cristo”  Efesios 4:32 (NBV)


Desafortunadamente y sin duda alguna, en esta vida resultarás herido. Y muchas de esas heridas serán intencionales, como resultado directo de lo que la gente diga de ti o te hagan. De hecho, cada vez que leas o escuches la palabra «perdón», es muy probable que instantáneamente vengan a tu mente ciertos dolores de cabeza, heridas y problemas de tu pasado. Los recuerdos todavía se sienten frescos porque te han herido muy profundamente.


Cuando fuiste profundamente herido, a menudo es difícil considerar perdonar a los perpetradores. Pero la Biblia te da una razón muy importante por la que necesitas perdonar.

Perdona a tus agresores porque Dios ya te perdonó a ti.

La Biblia dice en Efesios 4:32, “Más bien, sean bondadosos y compasivos unos con otros, y perdónense mutuamente, así como Dios los perdonó a ustedes en Cristo.” (NVI).

El recordar cuánto te ha perdonado Dios, te ayudará a perdonar más a quienes te han herido.


Pero también lo opuesto es cierto. Si no crees y aceptas con fe que has sido perdonado por Dios, es probable que te resulte imposible perdonar a los demás. Si ese es tu caso, analiza profundamente si realmente crees que Dios te ha perdonado. Habla con Él sobre cualquier duda que tengas.

Piensa en ello de esta manera: Dios ha borrado completamente tus registros de pecados cometidos, por lo que Jesucristo hizo en la cruz. Todas las cosas por las que mereces ser castigado, han sido borradas, porque Dios te ha perdonado. A medida que aceptes esta verdad, te resultará cada vez más difícil guardar rencor contra otra persona.


No importa lo que alguien te haga, nunca tendrás que perdonar a otra persona más de lo que Dios te ha perdonado a ti. Y si has aceptado a Jesús como tu Señor y salvador, el Señor de los Cielos ya te ha perdonado. Y esa es una promesa.

MEDITA EN ESTO:

  • Cuando escuchas la palabra “perdón”, ¿qué heridas de tu pasado te vienen a la mente? ¿Has perdonado a las personas que causaron esas heridas?
  • ¿Ha experimentado el perdón de Dios? ¿De verdad crees que eres perdonado? Si es así, perdona libremente a los demás. Si no es así, pídale a Dios que te ayude a creer verdaderamente que estás perdonado y, a su vez, que te ayude a perdonar a otras personas.
  • ¿Cómo puedes expresar hoy tu agradecimiento a Dios por su perdón?