“GRATITUD AL SEÑOR”

“GRATITUD AL SEÑOR”

Diciembre 27 del 2020

Hoy es el último domingo del año. La verdad el 2020, ha sido de muchas pruebas, lágrimas, tristezas, y la incertidumbre del futuro mediático nos agobia. No obstante dice la Palabra del Señor:

“Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús”. 1 Tesalonicences 5:18


No dice «Dad gracias por todo», porque no podemos agradecer por los abusos, la violencia, las enfermedades y el hambre; dice  “Dad gracias en todo», porque aún en medio de esta terrible pandemia, crisis económica y crisis política en algunos países, el Señor está con sus hijos, con aquellos que somos de su familia, por la sangre de Jesucristo.  

 Albert Einstein dijo en una ocasión: “Dios juega a los dados, con sus criaturas”. Pero no, no es verdad. Mire, reflexionemos:

“El día que clamé, me respondiste; Me fortaleciste con vigor en mi alma”. Salmo 138:3

Como hemos escrito en otras ocasiones, si usted está leyendo estas líneas quiere decir que ha sido muy bendecido, porque tiene la economía suficiente para tener un teléfono inteligente, un servicio de internet, o de datos, y la salud visual y en todo su cuerpo para “abrir” este mensaje. ¿Le parece poco para agradecer al Señor? No digo que nos encontremos en el mejor momento, pero, decía mi abuela: “Hay quienes lloran con los dos ojos y hay quienes lloran con uno, porque eso es lo que tienen”. Es mejor estar aburrido y desesperado por estar encerrado, que esperando cama en un hospital. ¿Se ha quedado un día sin comer? Incluso vemos bromas por las redes sociales, señalando como subimos de peso en medio de esta pandemia. Todos los que en este momento estamos leyendo estas líneas, entramos en la estadística de la ONU, como parte de 10% más favorecidos de todo el planeta.

“Y cantarán de los caminos de Jehová, Porque la gloria de Jehová es grande”. Salmo 138:5

Esto es más que suficiente, para ser agradecido con Dios. Cierto la amenaza, incertidumbre y temor por el contagio de Covid19, aún permanece, pero, en el Señor tenemos confianza:

“Si anduviere yo en medio de la angustia, tú me vivificarás; Contra la ira de mis enemigos extenderás tu mano, Y me salvará tu diestra”. Salmo 138:7

Seguro que conoce hermanos en Cristo o amigos que se contagiaron del virus, pero, tenemos muchos testimonios de que el Señor los ha sostenido, no ha faltado familiar, médico, o tanque de oxígeno aunque desde casa se atiendan, porque están saturados los hospitales. Aún ahí llega la misericordia de nuestro Señor. E incluso, en los casos cuando hijos de Dios y siervos del Altísimo llegan a sucumbir por este terrible virus, el partir de este mundo con la esperanza de abrir los ojos frente al rostro de nuestro Señor Jesucristo, ¡no tiene precio! 

“Jehová cumplirá su propósito en mí; Tu misericordia, oh Jehová, es para siempre; No desampares la obra de tus manos. Salmo 138:8

Desde luego que el Señor no se equivoca, para cada uno de nosotros tiene un plan personal de vida que se integra al “gran rompecabezas” que es el destino de todos nosotros porque así nos prepara para la vida eterna. Por todo ello, conéctese para dar gracias al Señor todos juntos, reunámonos a través de las redes sociales que por vía electrónica nos sirven para que en tiempo real, podamos recibir la Palabra del Señor y digamos ¡gracias Señor!

“Te alabaré con todo mi corazón; Delante de los dioses te cantaré salmos”. Salmo 138:1

Buenos días

J. L. R.