LA MOTIVACIÓN CORRECTA

Viernes 13 de Noviembre del 2020

LA MOTIVACIÓN CORRECTA

“Nosotros no predicamos acerca de nosotros mismos; anunciamos que Jesucristo es el Señor. Lo único que decimos de nosotros es que somos siervos de ustedes por amor a Jesús»   2 Corintios 4:5 (NBV)


Cuanto más vivas una vida centrada en tí mismo, más propenso serás al desánimo. Cada vez que olvides que no se trata de ti, te volverás orgulloso, temeroso o amargado. Y esos sentimientos siempre te llevarán al desánimo porque te mantienen enfocado en ti mismo.

La Biblia dice en 2 Corintios 4: 5, Como ven, no andamos predicando acerca de nosotros mismos. Predicamos que Jesucristo es Señor, y nosotros somos siervos de ustedes por causa de Jesús.” (NTV).

¡No se trata de ti! Dios te puso en esta Tierra y tiene un mensaje que quiere proclamar al mundo a través de ti. Pero ese mensaje de vida, no se trata acerca de ti. Se trata acerca de Jesucristo.

Estas 5 palabras, «no se trata de ti», es la expresión más contracultural que puedas escuchar, y son la verdadera base de tu razón de vivir en este mundo. Casi todo en la sociedad contemporánea (canciones, videojuegos, programas de televisión, noticias y anuncios) dice que en lo primero debes pensar es en ti mismo.

A veces desearía no recordar esa expresión de 5 palabras, porque al tenerla en mente, mi vida estará a prueba constantemente con ese principio. ¡Tengo que recordarlo varias veces al día! Cuando alguien me elogia, me critica, me juzga mal o no está de acuerdo conmigo, tengo que recordarme: «No se trata de mí». ¿Por qué? Porque cuando me concentro en mí, me desanimo y me caigo.


En cambio, como dice Pablo en el versículo de hoy, somos siervos por amor de Jesús. Eso significa que estamos motivados a servir a los demás por lo que Jesús ha hecho por nosotros.

Dios siempre estará más interesado en por qué estás haciendo lo que estás haciendo, que en lo que realmente estás haciendo. Le interesan más las motivaciones de tu corazón. La razón por la que estás haciendo algo siempre determinará cuánto tiempo vas a estar haciéndolo. Si estás motivado por una ambición egoísta, eso nunca será suficiente para persistir. Eventualmente te desanimarás y renunciaras a tu propósito.

Pero cuando estás motivado para hacer algo, debido a cómo eso ayuda al avance del Evangelio y glorifica a Jesús, tendrás el aliento que necesita para llevarlo a cabo hasta el fin.

Reflexiona en esto:

¿Cómo te animan las personas más cercanas a ti a servir a los demás con la humildad de Cristo?
¿Cómo te motiva el amor de Jesús por ti, a pensar en los demás más de lo que piensas en ti mismo?
¿Cómo te anima Dios cuando tienes la motivación correcta?