noviembre 4, 2020 – aprendiendojuntosdejesus

Miércoles 4 de Noviembre del 2020

ACEPTANDO SER PARTE DE LA FAMILIA

«Porque si bien la paga del pecado es muerte, el regalo que nos da Dios es vida eterna a través de Jesucristo nuestro Señor» Romanos 6:23 (NBV)

La Biblia dice en Romanos 6:23, “La paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro”. Se podría decir que la gracia es el regalo que sigue y sigue dándose. Cuando conoces a Jesucristo, su gracia y su amor, la cosa se pone cada vez mejor y mejor. Está disponible y se extiende por toda la eternidad. Entonces; ¡Lo mejor está por venir!

¿Cómo será el Cielo? Vas a reunirte con tus seres queridos que tuvieron un encuentro personal con el Señor. Serás recompensado por tu fe. Te asignarán un puesto de trabajo que te encantará hacer. Te liberarás del dolor, la depresión, la desesperación, la vergüenza y la culpa, y te regocijarás y festejarás por la eternidad. ¡Qué buena oferta!

Pero para esto, hay solo un requisito: Tienes que aceptarlo.

Imagínate llegar a tu casa hoy y encontrarte un regalo envuelto sobre la mesa del comedor, ¿podrías dejarlo ahí, sin abrirlo, hasta el próximo año? ¡Eso sería totalmente absurdo! Un regalo no tiene valor a menos que lo aceptes, tomándolo y abriéndolo. Debes aceptar la gracia de Dios a través de su Hijo, Jesucristo.

Tal vez no quieres abrirlo, porque tienes miedo de encontrarte con el rechazo de alguien. Quizás tus padres te rechazaron. Quizás fuiste rechazado por un novio o una novia, y eso te dolió profundamente. O tal vez fuiste rechazado por un hermano o hermana o por compañeros de clase. Tal vez te haya rechazado un ex-cónyuge que te abandonó y dijo cosas hirientes en las que hoy todavía piensas.

Pero hay una persona que nunca, nunca, nunca te rechazará, y su nombre es Jesucristo. Te está diciendo: «Ven a casa». ¿Has estado secretamente abrumado y oprimido por esa vergüenza en tu vida? Puedes deshacerte de ella hoy mismo. Cuanto más comprendas la gracia de Dios, más te enamorarás de Dios y más querrás acercarte a Jesús, porque es casi imposible no amar a alguien que te ama tantísimo.

Reflexiona en todo esto:

¿Cómo deberías responder a la gracia de Dios, cuando comprendemos que es un regalo?
¿Qué culpa, vergüenza o amargura de tu pasado te impidió, o te está impidiendo aceptar hoy la gracia de Dios? ¿Ya se la has entregado completamente a Dios?
¿Qué significa “volver a casa” con Dios?

CÓMO PUEDES UNIRTE A LA FAMILIA DE DIOS…

La Biblia dice que ninguna persona alcanza el estándar perfecto de Dios. Sin embargo, Dios todavía te ama, a pesar de que has pecado y tienes defectos en abundancia. De hecho, Dios te ama tanto que envió a su Hijo, Jesús, para limpiarte de tus pecados y hacerte parte de la familia de Dios.

Si estás listo para ser parte de la familia de Dios, aquí tienes una oración con la que puedes comenzar:

“Amado Señor, sé que cuando muera, voy a abrir mis ojos ante ti, para rendirte cuentas. Reconozco que no te he considerado en mi vida. Sé que he pecado contra ti y he vivido según mis deseos y anhelos, no los tuyos. Quiero que eso cambie hoy, comenzando desde este mismo momento. Quiero apartarme del estilo de vida que he venido viviendo, solo pensando en mis satisfacciones y placeres.

“Gracias por enviar a Jesús a morir por todo lo que hice mal para no tener que pagar la sentencia muerte por ello. Sé que no merezco tu perdón. Sé que solo tu gracia puede salvarme, Señor.

“Jesús, gracias por amarme tanto que cargaste sobre ti todas mis transgresiones y pecados. Me hiciste aceptable para el estándar de Cielo y humildemente te pido que me salves. Te pido que me perdones y limpies de los pecados y los pésimos hábitos que están arruinando mi vida en este momento. Yo creo en ti, Jesús. Y creo que cumplirás tu promesa de salvarme al momento de creer en ti y aceptarte como mi único y suficiente salvador. En el nombre de Jesús. Amén.»

Si hiciste esta oración de manera sincera, ya diste el paso para ser parte de la familia de Dios. Ahora, para conocer cómo se vive siendo parte de esta familia, empieza a leer diariamente la Biblia, empieza por el Evangelio de Marcos, ora todo los días (que es simplemente platicar con Dios) y busca reunirte con personas como tú, que han decidido seguir a Jesucristo, aprendiendo y estudiando su Palabra.

¡Bienvenido!!!