ANTÍDOTO CONTRA LA SOLEDAD: LA MENTE DE CRISTO

Domingo 18 de Octubre del 2020.

ANTÍDOTO CONTRA LA SOLEDAD: LA MENTE DE CRISTO

«Sin embargo, no estoy solo, porque el Padre está conmigo» Juan 16:32 (NTV)


Tener la mente de Cristo significa estar siempre consciente de que Dios está contigo.

Vemos esto en la vida de Jesús. Jesús vivió en la presencia de Dios y permaneció conectado al favor de Dios. No importa lo ocupado que estuviera, se mantuvo en sintonía con el Padre. Jesús dijo: “Realmente no estoy solo, porque el Padre está conmigo” (Juan 16:32).


Por eso, el mayor antídoto contra la soledad es pensar como Jesús. Cuando tengas la mente de Cristo, podrás, como Él, decir: «No estoy solo, porque sé que el Padre siempre está conmigo». Cuando nos sentimos solos, a menudo es el resultado de no vivir con la mente de Cristo; no somos conscientes del cuidado constante de Dios.


¿Cómo puedes estar siempre consciente del cuidado constante de Dios? Una forma es a través de la oración. Jesús hizo de la oración un hábito diario: “Jesús solía ir a algún lugar donde podía estar solo y orar” (Lucas 5:16).

Nota que este versículo dice que Jesús a menudo se escabullía para poder orar. Y tú también puedes hacer eso mismo de vez en cuando, si quieres tener la mente de Cristo. La vida de oración de Jesús fue continua. Hizo que la prioridad de su vida fuera estar con su Padre. Era un hábito diario.

¿Haces un alto en el curso de tu rutina diaria para orar? ¿Crees que tu día sería mejor si desarrollas este hábito? Si Jesús sintió la necesidad de escabullirse y orar durante su día normal de actividades, ¡entonces piensa cuánto más lo necesitamos nosotros!


Cuando no te tomas el tiempo para hablar con Dios, te pierdes de los regalos, dones, guianza y consejos que Dios tiene preparados para ti. No es la voluntad de Dios que estés demasiado ocupado para no poder platicar con Él. De hecho, podrás hacer más en cada área de tu vida si te tomas el tiempo para detenerte y orar cada día.

Esto parece contradictorio. Si cada día te detienes a orar, ¿cómo podrás hacer más cosas? Para ser altamente productivo, tienes que estar concentrado en lo que haces. Y podrás enfocar tu mente y corazón en lo que hagas, porque te tomaste el tiempo para platicar con Dios y así permitir que el Espíritu de Dios te recuerde a través de la oración cuál es tu misión y propósito.


Jesucristo sabía perfectamente quién era y cuál era su propósito. Siempre estuvo consciente de la presencia de Dios en su vida. Cuando tengas la mente de Cristo, también sabrás esas  dos cosas, y siempre estarás consciente de que Dios está contigo.

Considera esto:

  • Puede que necesites un poco de planificación para dedicar tiempo a la oración durante tu día. ¿Cómo puedes acomodar tu horario para tener tiempo disponible? ¿Cómo puedes cambiar tu forma de pensar para ser más flexible y permitir más tiempo para orar?
  • ¿Quién puede ayudarte a mantener tus propósitos y hábitos de oración mientras trabajas, para así poder desarrollar la mente de Cristo?
  • ¿La oración, que es platicar con Dios, tiene que estar programada o durar mucho? ¿Por qué o por qué no?