“LA CLAVE EN OSEAS 6:2”

“LA CLAVE EN OSEAS 6:2”

Septiembre 27 del 2020

Uno de los enigmas y puntos de discusión entre pensadores, teólogos, filósofos e historiadores es saber con exactitud, el día en que resucitó Jesús después de su triunfo en la cruz. El mismo Señor, en varias ocasiones dio “claves” para anunciar su resurrección:

“Y apiñándose las multitudes, comenzó a decir: Esta generación es mala; demanda señal, pero señal no le será dada, sino la señal de Jonás”. Lucas 11:29

Constantemente el Señor Jesús, citaba el antiguo testamento con más claves:

“Y los judíos respondieron y le dijeron: ¿Qué señal nos muestras, ya que haces esto? Respondió Jesús y les dijo: Destruid este templo, y en tres días lo levantaré”. Juan 2:18 y 19

Sin embargo, todos prefieren atender a criterios y contabilidad de días. Revisan el calendario juliano, revisan el almanaque árabe, y tratan de analizar las horas de más minutos del sistema judío. Pero, nadie ve que la clave está en la misma Palabra del Señor:

«Venid y volvamos a Jehová; porque él arrebató, y nos curará; hirió, y nos vendará. Nos dará vida después de dos días; en el tercer día nos resucitará, y viviremos  de él”. Oseas 6:1 y 2

Es decir, vemos dos cosas que “dormimos” dos días y durante el tercero resucitamos, como Jesús. Además de que los Evangelios de Lucas y Juan son claros en señalar que fue un día como hoy, domingo, primer día de la semana, que resucitó:

“El primer día de la semana, María Magdalena fue de mañana, siendo aún oscuro, al sepulcro; y vio quitada la piedra del sepulcro”. Juan 20:1

Así que obedezcamos a la Escritura y desechemos cálculos sin fundamento, porque hoy es día de iniciar la semana adorando y alabando al Señor, pues la iglesia primitiva así lo hacía:

“Cada primer día de la semana cada uno de vosotros ponga aparte algo, según haya prosperado, guardándolo, para que cuando yo llegue no se recojan entonces ofrendas”. 1 Corintios 16:2

Así que, hoy primer día de la semana conectemos nuestros aparatos, tabletas, celulares y computadoras, compartamos con el que no tiene y disfrutemos todos juntos de la Palabra del Señor, la cual no se detiene, pues aunque las instalaciones estén cerradas, la iglesia ha resucitado con Cristo y está más unida que nunca. Recuerde:

“Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de reposo, todo lo cual es sombra de lo que ha de venir; pero el cuerpo es de Cristo”. Colosenses 2:16 y 17

Porque la clave, está en Oseas 6:2.

Buenos días

J. L. R.