En ti confiaré

¿TE AYUDO CON TU CARGA?… JESÚS

 

 

Jueves 3 de Enero del 2019.

 

JESÚS TE QUIERE AYUDAR A LLEVAR TU CARGA

«Vengan a mí los que estén cansados y afligidos y yo los haré descansar.  Lleven mi yugo y aprendan de mí, que soy manso y de corazón humilde. Así hallarán descanso para el alma, porque mi yugo es fácil de llevar y mi carga es ligera».» (Mateo 11: 28-30 NBV).

 

No sé qué tipo de carga estas llevando en estos momentos. No sé qué peso tienes sobre tus hombros. Pero sí sé la solución a tu problema.

Jesús dice: «Vengan a mí los que estén cansados y afligidos y yo los haré descansar.  Lleven mi yugo y aprendan de mí, que soy manso y de corazón humilde. Así hallarán descanso para el alma, porque mi yugo es fácil de llevar y mi carga es ligera».» (Mateo 11: 28-30 NBV). 

Durante muchos años no me quedo muy clara esta Escritura, porque no sabía exactamente como funciona un yugo. Cuando Jesús dice: «Toma mi yugo sobre ti», me sonó como si Jesús fuera a darme algo más que cargar, algo más con lo que lidiar. ¡Mi carga ya es lo suficientemente pesada, Señor! ¡No necesito también cargar tus problemas!

Luego me enteré de que un yugo es en realidad una tabla con dos arcos en ella, y que la pones sobre dos cabezas de ganado para que juntas puedan jalar una carga.

Lo valioso de un yugo es que reduce la carga a la mitad. Sin un yugo, el toro debe jalar toda la carga por sí solo. Pero si unes con un yugo a este animal con otro animal, las dos vacas o toros juntos jalaran la carga, reduciéndose a la mitad el peso de la carga para cada uno. 

Cuando Jesús te dice que pongas su yugo sobre ti, no te está diciendo que te pondrá encima sus problemas. ¡Jesús no tiene ningún problema! Él te está ofreciendo compartir tus problemas con Él. Quiere ayudarte compartiendo tu carga con Él. Va a tomar tu estrés sobre sí mismo y lo llevará junto contigo.

¡Guauu!… Que ofrecimiento tan fenomenal.

Jesús usa tres verbos muy importantes en este pasaje bíblico: ven, lleva y aprende. Jesús dice: «Ven a mí. Haz equipo conmigo. Entonces, lleva una carga más ligera. Aprende como lo hago. Esto va a reducir tu estrés. Esto te facilitará tu paso por esta vida».

Cuando estás unido a Cristo con el mismo yugo, te mueves junto con Él. Te mueves en la misma dirección y a la misma velocidad; entonces te moverás en la dirección correcta y a la velocidad correcta.

Reflexiona sobre esto:

 

• ¿Por qué a veces es tan difícil aceptar la ayuda de alguien que quiere compartir tus cargas con él y facilitarte la tarea?
• ¿Tienes personas en tu vida que estén dispuestas a hacer eso por ti? ¿Y tú, cómo te estás ofreciendo a los demás para ayudarles a reducir su estrés?
• Jesús ya sabe todo acerca de tu estrés. ¿Estás listo para tomar su yugo? ¿Si no, que es lo que te detiene?